Hace unas semanas, aprovechando la reprogramación del tema de este blog usando HTML5 tuve la buena idea de incluir un par de mejoras (ambas relacionadas con comentarios) que llevaba mucho tiempo postergando. Una fue arreglar el crecimiento dinámico de la caja de texto para comentarios; da un sentido estético y es funcionalmente interesante (nos permite releer el mismo al completo sin problemas antes de enviarlo, una suerte de vista previa). La otra fue añadir una sugerencia para comentarios largos.
La idea es que un comentario largo, demasiado largo, contiene por necesidad varias ideas. Generalmente, si tratamos varias ideas es mucho mejor escribir un post en el blog propio y enlazar ese post en el que queríamos comentar. No sólo por esta netiqueta blogger básica que dicta no escribir un comentario mucho más largo que el post original, sino porque si merece una reflexión larga, es mucho más sano alzar el debate, distribuirlo entre blogs.
Por criterio arbitrario (pudo ser cualquier otra longitud), ahora cuando estamos escribiendo un comentario en este blog y sobrepasamos la longitud de 1.000 caracteres aparece automáticamente una cajita discreta que nos recomienda publicar en nuestro blog dejando un enlace a la entrada en cuestión (lo cual a su vez dejará un pingback para trazar la conversación completa, incluyendo tu post en tu blog).
Sí, sé que todo esto suena muy básico. Pero es que hay un conocimiento del medio y de los blogs que muchas personas desconocen, y no está de más repetirlo.
Y sí, sé que en estos tiempos de retuits en que incluso quienes tienen muchos lectores lamentan que en sus blogs no hay comentaristas mientras intentan recuperar el tiempo perdido, recomendar a un comentarista capaz de dejar algo más que un «me gusta tu post» que abandone su comentario y lo publique como un post en su propio blog parece un suicidio, pero no lo es. Es, de hecho, lo que nos permitirá tener una blogosfera que sea de verdad rica, diversa y viva, capaz de articular debates y conversaciones no monotemáticas.
Por supuesto, nada es obligatorio y pueden escribir un comentario de la longitud que deseen: si les aparece esta recomendación pero deciden seguir adelante, su comentario será procesado normalmente (publicado, moderado como cualquier otro) y si tengo algo que aportar, le seguirá mi respuesta. Las recomendaciones como ésta son sólo eso, recomendaciones, pero creo que es harto interesante promover activamente la blogosfera. Y recordar a nuestros lectores que ellos también tienen un blog (la mayoría, de hecho, lo tiene, si bien muchas veces algo abandonado) es, en tiempos de recentralización descafeinante y spammeadora, (casi) revolucionario.